Debido a que la enfermedad de Huntington afecta a la mente, el cuerpo y las emociones, los síntomas tienden a imitar otras condiciones.
Los síntomas generales en las primeras etapas suelen incluir pérdida de memoria, dificultad para tomar decisiones, cambios en el estado de ánimo: por ejemplo, un aumento en la depresión, la ira o irritabilidad. También existe una creciente falta de coordinación, espasmos u otros movimientos involuntarios; dificultad para caminar, hablar y/o tragar. Es importante saber que el orden en que se desarrollan los síntomas puede variar de una persona a otra.
Los síntomas físicos incluyen el desarrollo de tics o movimientos involuntarios en los dedos, pies, cara y torso. Un aumento de la torpeza, pérdida de la coordinación y el equilibrio, así como una dificultad para hablar. Los pacientes tienden a apretar o rechinar los dientes. También tienen problemas para tragar o comer, contracciones musculares continuas y un aumento en los tropezones o caídas.
Respecto a los síntomas mentales, existe una disminución de la concentración, la presencia de olvidos y deterioro en la memoria, una poca capacidad de realizar juicios, la dificultad para tomar decisiones y responder a las preguntas, y una dificultad para manejar. Con el tiempo estos síntomas pueden progresar a una etapa donde la persona pierde la capacidad de reconocer objetos familiares, personas y lugares.
Los síntomas emocionales suelen ser sutiles, y por lo tanto fáciles de malinterpretar. Muchas de las condiciones y circunstancias de la vida pueden provocar cambios de humor, por lo que es especialmente importante saber cuáles son los signos psiquiátricos que pueden indicar la enfermedad de Huntington. La depresión es el síntoma psiquiátrico más común de la enfermedad de Huntington, esto se manifiesta generalmente con hostilidad, irritabilidad, falta de energía y desinterés permanente en la vida (falta de placer o alegría). Algunos pacientes presentan un trastorno bipolar (maníaco-depresivo).
Una persona con la enfermedad de Huntington eventualmente puede comenzar a mostrar un comportamiento psicótico, manifestando alucinaciones, comportamiento inadecuado o agresivo y paranoia.
