El colágeno es la molécula proteica más abundante en los mamíferos, y representa alrededor del treinta por ciento de las proteínas en el cuerpo humano. A menudo, se le considera como el pegamento que mantiene unido al cuerpo.
El colágeno se encuentra en los tejidos fibrosos, tales como la piel, los ligamentos y los tendones; también está presente en los huesos, los vasos sanguíneos, la córnea del ojo, y en el intestino. Las fibras formadas por el colágeno son bastante flexibles, pero de gran resistencia. Cabe resaltar que se necesita de una fuerza de varios cientos de kilogramos para romperlas.
El colágeno es vital para el fortalecimiento de los vasos sanguíneos, además le da a la piel su elasticidad y fuerza. La degradación del colágeno es la causa de las arrugas y otros problemas en la piel. El colágeno no debe ser confundido con la elastina, ya que a diferencia del colágeno, esta no proporciona resistencia a los tejidos estructurales.
Como resultado, el colágeno es uno de los suplementos más populares entre las personas de mayor edad, a causa de sus propiedades curativas de la piel.
