Unos científicos de la Universidad McGill en Montreal, han estado trabajando en el uso de un probiótico (los probióticos son bacterias que resultan de gran ayuda para su huésped), con el propósito de reducir el ‘colesterol malo’ en las personas que lo consumen. El nombre de este probiótico es Lactobacillus reuteri NCIMB 30242.
A lo largo del estudio, aproximadamente la mitad de un grupo de ciento veintisiete sujetos de prueba recibieron dos dosis del lactobacilo, dos veces al día durante nueve semanas. Al resto de los sujetos se les dio un placebo. Al final de la prueba las personas que recibieron el probiótico presentaron niveles más bajos de colesterol malo que los del grupo del placebo.
También hubo una reducción del seis punto tres por ciento en sus ésteres de colesterol -estas son moléculas de colesterol que se unen a los ácidos grasos-. Con sólo doscientos miligramos al día, se dice que este probiótico es más eficaz que las dosis de medicamentos requeridas actualmente para tratar los niveles altos de colesterol.
La compañía que posee la patente de este probiótico es Micropharma, y ya ha comenzado a distribuir en Estados Unidos este medicamento, bajo el nombre de Cardioviva.
