Una empresa con sede en California quiere tomar en serio la pregunta que muchas personas se hacen antes de conducir: “¿He bebido demasiado?” El Breathometer es un pequeño dispositivo de veinte dólares que se conecta a la entrada de audio de un smarthphone y mide la cantidad relativa de alcohol en el aliento con mayor precisión que otros aparatos similares en el mercado.
Con la aplicación de acompañamiento, los dispositivos móviles pueden mostrar claramente la tasa de alcoholemia, que es la medida legal que se usa para evaluar si una persona está conduciendo bajo la influencia del alcohol.
Soplando una sola vez en el dispositivo, podría ayudar a las personas a determinar cuándo su toma de decisiones podría verse afectada, evitar pasar una noche en la cárcel y lo más importante, a salvar vidas.
El Breathometer puede colocarse en un llavero para hacer más cómoda su transportación. Además servirá como recordatorio para las personas cada vez que saquen las llaves para conducir. La compañía que los fabrica planea lanzar sus dispositivos una vez que reciba la aprobación de la FDA.
El mejor uso probable de este aparato quizá sea el de ayudar a las personas a ayudarse mutuamente, después de todo, uno de los dichos más famosos antes de conducir es “No estoy ebrio”, por lo que sólo tendrían que soplar en un teléfono inteligente para permitir que las personas alrededor conozcan el estado real de su condición.
Sin embargo, hay otro aspecto prometedor de este dispositivo: el análisis de aliento para buscar otros componentes químicos además del alcohol. Ya que este aparato es capaz de detectar componentes químicos volátiles en la respiración de una persona, un artefacto similar puede utilizarse para identificar el cáncer de pulmón. De hecho, podrían ser esenciales para el desarrollo de un verdadero Tricorder en el futuro.
