La mayoría de las personas está acostumbrada a pensar en la planta de tabaco como la fuente de una serie de productos que dañan la salud. Sin embargo, un nuevo estudio de la Unidad de Inmunología Molecular Hotung, en la Universidad de St. George en Londres, ha demostrado que las plantas de tabaco pueden ser modificadas genéticamente para producir anticuerpos contra la rabia.
Es de esperar que la presente investigación ofrezca una forma segura y barata para el tratamiento de la rabia en los países con bajos recursos.
Sin un tratamiento adecuado, la rabia puede infectar el sistema nervioso central y provocar la muerte. Según la Organización Mundial de la Salud, la rabia se presenta en más de ciento cincuenta países en todo el mundo, y mata alrededor de cincuenta y cinco mil personas cada año; principalmente en los continentes de Asia y África. Es importante mencionar que el tratamiento actual, que usa inmunoglobulina antirrábica humana es caro.
El nuevo estudio encontró la forma de ‘humanizar’ las secuencias genéticas del anticuerpo monoclonal del murino (un anticuerpo que se encuentra en los roedores, capaz de inmunizar contra la rabia), haciéndolo tolerable para las personas. Ahí es donde entra la planta del tabaco, que se convirtió en una plataforma de producción para llevar el anticuerpo.
Se encontró que el anticuerpo producido a partir de las plantas genéticamente alteradas o transgénicas, es eficaz en el tratamiento de una amplia gama de virus de la rabia, previniendo que el virus se adhiera a las terminaciones nerviosas alrededor de la mordedura, lo cual evita su viaje al cerebro a través de los nervios.
Sin duda, la producción de un anticuerpo de bajo costo en las plantas, abrirá una nueva perspectiva para la prevención de la rabia en los países más pobres.
