Esta podría ser la nueva generación de vacunas

Nuevas vacunas ADN
Vacunar a un bebé de dos meses utilizando una aguja, puede ser doloroso para el niño y para sus padres. Por esta razón, los científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts han estado trabajando para convertir el uso de agujas en cosa del pasado.

Gracias a una nueva película de polímero soluble, la aguja de vacunación podrá ser reemplazada por un parche. Este avance no sólo hará que las vacunas sean menos angustiosas, también permitirá una mejor conservación y transporte, más barato que las técnicas convencionales.

Cabe mencionar que las vacunas no impiden que las personas contraigan enfermedades, al menos por su propia cuenta. Las vacunas actúan provocando que el sistema inmunológico del cuerpo lance una reacción antes de que exista una amenaza real de la infección.

Cuando el cuerpo se encuentra con una infección (un virus por ejemplo) genera anticuerpos que son específicos para combatirlo. Ahora bien, si una persona se encuentra eventualmente con la misma infección, el cuerpo será capaz de reconocer la amenaza y destruirla con su propio sistema de defensas inmunitarias. Por desgracia, eso significa que la única manera de ganar la inmunidad para una enfermedad específica, es padeciéndola.

Una vacuna es una especie de enfermedad artificial que le dice al cuerpo cómo es el virus original (evitando preferentemente el peligro de una infección real). Cuando se inyecta una vacuna, nuestro organismo crea anticuerpos específicos, dejando a nuestro sistema inmunológico reparado para combatir con mayor eficiencia al virus real.

Hay dos tipos de vacunas. El primero utiliza virus atenuados. Este método es común y relativamente simple, ya que utiliza virus inactivos o muertos. Lo importante son las proteínas que recubren al virus. Siempre que el sistema inmunológico pueda reconocer estas proteínas el resto no importa.

Desafortunadamente, aún con los virus atenuados existe una remota posibilidad de adquirir la infección, por lo que una alternativa consiste en hacer la vacuna con las proteínas del virus. Estas proteínas pueden provenir del virus o producirse de forma sintética. Por desgracia, este método es más difícil y consume mucho tiempo, y podría ser ineficiente contra un virus que muta constantemente o posee muchas variantes.

Producir vacunas es complicado, especialmente con virus demasiado peligrosos, como el VIH. Por esta razón, algunas vacunas utilizan virus similares entre sí. Edward Jenner, el creador de la vacuna contra la viruela es un ejemplo de ello. Él utilizó las proteínas de la viruela vacuna para inducir una reacción inmune que produce anticuerpos capaces de reaccionar ante ambas enfermedades.

Ahora bien, el nuevo método desarrollado por los científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts no emplea las proteínas del virus, utiliza secciones específicas de su ADN. Esto ha tenido un cierto éxito en animales de investigación durante veinte años, pero las pruebas en humanos no habían sido eficaces porque el cuerpo del paciente destruye el ADN antes de que el sistema inmune tenga la oportunidad de responder.

Por esta razón, los investigadores idearon la forma de introducir el ADN a través de la piel, usando un parche dérmico compuesto por varias capas de polímero soluble en agua, estas capas permiten que el ADN sea absorbido por las células del cuerpo. Cabe señalar que este polímero también puede utilizarse para introducir antígenos y otras moléculas pequeñas en el cuerpo.

kostleige.com

Entradas relacionadas