Los investigadores de la Universidad de Columbia en Nueva york, han descubierto lo que creen, podría ser el origen animal del síndrome respiratorio de Oriente Medio, también conocido como MERS. Después de examinar un murciélago en Arabia Saudita, muy cerca del lugar donde apareció la primera persona infectada con este misterioso virus.
Extensas pruebas de sangre realizadas en el murciélago insectívoro, encontraron una coincidencia genética del cien por ciento para la infección por MERS.
Sin embargo, si los murciélagos son de hecho la fuente, el equipo sugiere que es probable que otro animal huésped intermediario, está obteniendo el virus de los murciélagos y luego infecta a los seres humanos. De hecho, un estudio previo sugirió que los camellos podrían ser portadores de este tipo de coronavirus, basándose en la búsqueda de rastros de anticuerpos contra el virus del MERS en la sangre tomada de los dromedarios en el Medio Oriente, en Omán.
A pesar de los informes de búsqueda del virus del MERS en animales, ninguno había probado una coincidencia genética. En el caso de los murciélagos, se tiene un virus idéntico en secuencia al que se encontró en el primer caso humano.
El MERS es un miembro de la familia de los coronavirus, una familia que incluye al virus del resfriado común, y el virus responsable del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS). El MERS fue visto por primera vez en los seres humanos en abril de 2012. La infección produce una enfermedad grave y a menudo mortal.
Hasta ahora, el origen del virus era desconocido y los murciélagos eran sospechosos, ya que llegan a causar una variedad de enfermedades humanas, incluyendo la rabia, el SARS, la Nipah, el Hendra o el Marbug.
En algunas de estas enfermedades la infección proviene directamente del contacto con palos, la inhalación del aire infectado, comer alimentos contaminados y en el caso más raro, a través de una herida por mordedura. Sin embargo, el virus podría transmitirse a los humanos a través de las ovejas, las cabras o el ganado. Esta búsqueda es sólo una muestra de una poderosa colaboración entre los socios comprometidos con la salud pública mundial.
