Los probióticos no son algo novedoso, sin embargo, cuando hablamos sobre nutrición estos se encuentran de moda. La mayoría de la gente ha visto o escuchado el término en muchas ocasiones, ya sea en comerciales, en alimentos como el yoghurt, suplementos alimenticios, e incluso en empresas de cosméticos que promueven sus productos con probióticos.
Pero ¿Qué son y por qué son tan importantes los probióticos? Los probióticos son bacterias vivas que ayudan a mantener un sistema digestivo saludable. El desarrollo y la comercialización de productos que contienen bacterias vivas ha florecido, ya que hay un reciente interés por consumir alimentos naturales que promueven la salud.
Sin embargo, muchos de estos numerosos anuncios deben ser apoyados científicamente. De hecho, la primera descripción conocida de los probióticos se produjo en 1908, cuando un científico ruso llamado Iliá Méchnikov observó que las personas europeas del campo, que consumían regularmente productos lácteos fermentados, tenían lapsos de vida más largos.
En los últimos años, se han realizado estudios para explorar el posible impacto de los probióticos en el comportamiento. Es en este contexto que el concepto de un psicobiótico ha surgido.
Los investigadores de la Universidad de Cork en Irlanda, definen un psicobiótico como un organismo vivo que, cuando se ingiere en cantidades adecuadas, produce un beneficio para la salud en los pacientes que sufren de alguna enfermedad psiquiátrica. Los científicos afirman que los psicobióticos ofrecen un enorme potencial para el tratamiento de la depresión y otros trastornos relacionados con el estrés.
La microbiota intestinal por otro lado, contiene aproximadamente un kilogramo de bacterias, que pueden ser moduladas por la dieta y muchos otros factores. De hecho, se sabe que el estrés de la infancia puede inducir cambios a largo plazo en el microbioma de las personas.
Algunos estudios preclínicos han apoyado firmemente la hipótesis de que los probióticos tienen el potencial de ejercer efectos conductuales e inmunológicos. Es importante señalar que los psicobióticos han demostrado tener efectos antiinflamatorios. Esto es importante porque la depresión y el estrés se asocian con la inflamación en el cuerpo.
Los estudios en humanos son todavía muy escasos, pero unos pocos han mostrado resultados prometedores. Es importante señalar que sólo un pequeño porcentaje de probióticos tiene un impacto en el comportamiento y puede calificar como psicobiótico; algunos de estos probióticos son el Lactobacillus helveticus R0052 y el Bacterium Longum.
