Este es un gran paso para las terapias con células madre

Prochymal
El año pasado se aprobó en Canadá, un nuevo tratamiento médico que utiliza células madre derivadas de la médula ósea. El fármaco Prochymal, ya se ha utilizado para tratar a niños con un tipo de enfermedad del sistema inmune que surge durante el trasplante de médula ósea. La compañía estadounidense Osiris Therapeutics Inc., responsable de su fabricación, afirma que el suyo, es el primer tratamiento basado en células madre en ser aprobado.

Sin embargo, esta no es una típica terapia de células madre (a diferencia de otros tratamientos en desarrollo, cuyo objetivo es el de reemplazar células dañadas), Prochymal utiliza células madre para suprimir una peligrosa respuesta inmune por parte del cuerpo.

Los trasplantes de médula ósea son necesarios cuando el uso de tratamientos contra el cáncer como la quimioterapia o la radioterapia, han destruido la médula ósea del paciente. La médula ósea donada es rica en células madre que dan lugar a todas las células sanguíneas del cuerpo. No obstante, cualquier persona que reciba uno de estos trasplantes, corre el riesgo de que las células que combaten las infecciones, presentes en la médula del donador, ataquen el cuerpo del paciente. El nombre de esta condición es conocida como enfermedad de injerto contra huésped.

Para tratarla, a menudo se utilizan esteroides que suprimen el ataque, pero en los casos en que no son eficaces, esta enfermedad puede causar daños graves en la piel, el hígado y el tracto digestivo; complicaciones que en algunos casos conducen a la muerte.

El juicio que ganó Prochymal para su aprobación involucró a cincuenta y nueve niños con enfermedad de injerto contra huésped que no estaban respondiendo a la terapia con esteroides. Los pacientes recibieron infusiones dos veces por semana durante cuatro semanas. Poco después de la primera infusión, el sesenta y tres por ciento mostró una mejoría clínica significativa. Esto significó que veintidós pacientes no estaban respondiendo al tratamiento. Ahora bien, del grupo de niños que respondió a la terapia, veintinueve sobrevivieron. Por otro lado, sólo dos pacientes del grupo que no mostró respuesta al tratamiento lograron sobrevivir.

Estos números sólo garantizan la aprobación de un tratamiento de último recurso, sobre todo porque el grupo beneficiado no mostró efectos adversos en su salud. Además, cabe resaltar que las células provienen de donadores adultos que son sometidos a varias pruebas, con el propósito de detectar cualquier enfermedad transmisible.

Sin duda estos son los primeros pasos en conjunto para la medicina regenerativa y las terapias con células madre, que han tenido su primera victoria gracias a esta aprobación.

kostleige.com

Entradas relacionadas