Algunas de las personas con bulimia, no sólo están al tanto de la sensación de vivir fuera de control, también viven con el estrés de saber que están dañando su cuerpo. Pero no hay razón para desanimarse, ya que el cambio es posible. Una persona puede aprender a romper el ciclo de atracones y purgas, para desarrollar una actitud saludable hacia la comida y su cuerpo.
Cuando una persona está pensando en conseguir ayuda para superar su problema de bulimia, entonces está dando un gran paso. Admitir que la relación con la comida está distorsionada y fuera de control es el primer paso para la recuperación. En segundo lugar está el superar la vergüenza o el miedo de lo que las demás personas puedan pensar sobre este problema, así será más sencillo hablarlo con la familia o los amigos.
Es posible que sea necesario mantenerse al margen por un tiempo de mirar revistas de cocina, las fiestas con alimentos abundantes o programas de televisión que hablen sobre comida. Aunque lo más importante es buscar ayuda profesional, ya que sólo el asesoramiento y el apoyo de profesionales especialistas en los trastornos de alimentación, pueden ayudar a las personas a recuperar su salud, aprender a comer con normalidad otra vez y a desarrollar hábitos y actitudes saludables.
Es muy probable que el tratamiento contra la bulimia tenga éxito cuando la persona deja de hacer una dieta. Una vez que se deja de restringir las calorías, seguir reglas estrictas y se deja de estar abrumado con la ansiedad o los pensamientos sobre los alimentos, puede romperse el círculo vicioso de la bulimia y comer con normalidad para alcanzar un peso saludable.
