Contra la neuropatía periférica, existe una variedad de tratamientos disponibles, que se extienden desde pastillas y cremas tradicionales para dietas especiales, hasta terapias que estimulan el sistema nervioso.
Los antidepresivos tricíclicos, especialmente los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina y noradrenalina, son un tratamiento favorable para las neuropatías. Estos alivian el dolor neuropático en personas que no sufren de depresión.
Por ejemplo, en junio de 2012, un grupo de investigadores de la escuela de Enfermería de la Universidad de Michigan informó que el uso de un antidepresivo llamado duloxetina, puede aliviar los síntomas de la neuropatía periférica inducida por la quimioterapia.
Otra clase de medicamentos comúnmente recetados para la neuropatía son los anticonvulsivos. Estos bloquean los canales de calcio en las neuronas para limitar el dolor. El tratamiento con opioides también es utilizado para tratar esta enfermedad, pero son menos favorables debido al riesgo que tienen para desarrollar dependencia en los pacientes. Sin embargo, los opioides han probado ser los más eficaces en la reducción del dolor.
Para algunos tipos de neuropatía como la neuralgia postherpética, los médicos recomiendan el tratamiento con un anestésico tópico, como la lidocaína. La aplicación de la capsaicina (que es la sustancia química que le da su sabor picante a los pimientos) también se ha utilizado para tratar el dolor neuropático.
Las terapias alternativas para la neuropatía periférica incluyen a los cannabinoides (una clase de sustancias químicas que se encuentran en la marihuana), la toxina botulínica tipo A (mejor conocida como botox), la ketamina, algunos suplementos dietéticos como la benfotiamina, e incluso los masajes quiroprácticos, el yoga, la meditación, la terapia cognitiva y la acupuntura.
Una última clase de tratamientos para la neuropatía son los llamados neuromoduladores. Estos incluyen tanto las tecnologías implantables como las no implantables (eléctricas o químicas) como los estimuladores de la médula espinal, bombas implantadas en la médula espinal, los electrodos que estimulan la corteza motora del cerebro y los métodos de estimulación cerebral profunda.
