Un descubrimiento realizado por investigadores de la Universidad de California, en San Francisco, podría ayudar a eliminar las crisis epilépticas en el futuro.
A través del trasplante de un tipo específico de célula en el cerebro, los investigadores han sido capaces de curar la epilepsia en ratones adultos, con la esperanza de que un tratamiento similar podría funcionar en los seres humanos.
Las crisis epilépticas son causadas por la activación anormal de muchas células nerviosas excitatorias en el cerebro, lo que resulta en contracciones musculares extremas. Por esta razón, los científicos fueron capaces de inhibir esta tormenta de señalizaciones nerviosas y eliminar las convulsiones en la mitad de los ratones tratados, reduciendo drásticamente el número de ataques espontáneos en el resto, con el trasplante único de las células de eminencia ganglionar medial en el hipocampo, una región del cerebro asociada con el aprendizaje y la memoria, así como las convulsiones.
Los ratones también se hicieron menos agitados, menos hiperactivos y tuvieron un mejor desempeño en las pruebas de laberinto. Las células de eminencia ganglionar medial son células progenitoras que se forman de manera temprana en el embrión e inhiben la señalización de los circuitos nerviosos hiperactivos mediante la generación de células nerviosas maduras llamadas interneuronas inhibidoras.
Los investigadores encontraron que las células trasplantadas de embriones de ratón, emigraron y generaron interneuronas que se integraron a los circuitos neuronales existentes, reemplazando esencialmente las células que fallan a causa de la epilepsia.
Este tecnología significa un paso alentador, que ofrece la posibilidad de controlar las crisis y el rescate de los déficits cognitivos en los pacientes con epilepsia; mejorando su salud y su calidad de vida. Cabe mencionar que un grupo de científicos en Oregón, desarrollaron un método para controlar las crisis epilépticas con ayuda de la seda.
