De acuerdo con tres estudios realizados en ratas, las mujeres que comen demasiados alimentos grasos y azucarados durante el embarazo, podrían poner a sus hijos en situación de riesgo, con problemas sobre consumo de alcohol o drogas, más adelante en su vida. Los resultados fueron presentados en la convención anual de la Asociación Americana de Psicología.
Los tres estudios duraron alrededor de tres meses y se utilizaron entre tres y cuatro ratas y diez o doce crías en cada uno. Durante el curso de los estudios, los investigadores encontraron que la descendencia de las ratas que comieron dietas ricas en grasas o azúcar pesaron más durante su crecimiento y bebían más alcohol. Además, las ratas cuyas madres fueron alimentadas con dietas altas en azúcar, tuvieron respuestas más sólidas a las drogas más comunes, como las anfetaminas.
La mayoría de las mujeres en Estados Unidos que se encuentran en edad de procrear tienen sobrepeso, esto puede deberse a que comen en exceso alimentos ricos en grasa y azúcar. El aumento de la obesidad prenatal e infantil, así como el número de jóvenes que abusan del alcohol, ha provocado que los científicos busquen constantemente una explicación para estos fenómenos.
Los investigadores pusieron a prueba la sacarosa y el jarabe de maíz de alta fructosa en las ratas, para ver si las diferencias químicas en los alimentos también causaban diferentes resultados. Cabe señalar que mientras que la sacarosa se produce naturalmente, el jarabe de maíz de alta fructosa se fabrica a partir del maíz.
Los hallazgos sugieren que incluso cuando las ratas se encuentran todavía en el útero, la exposición a dietas altas en grasa y azúcar puede aumentar el peso corporal e incluso conducir a una predisposición a beber alcohol, sin mencionar una mayor sensibilidad a las drogas. También es necesario observar cuáles son los tipos de dieta prenatal que las autoridades médicas sugieren a las mujeres embarazadas.
