Si por alguna razón usted está pensando en congelar sus óvulos, es importante acudir a una clínica de fertilidad con experiencia en el campo. Tan sólo en Estados Unidos, existen centros para el control y la prevención de enfermedades y una sociedad de tecnología para la reproducción asistida. Estos centros ofrecen información en línea sobre las clínicas de fertilidad en el país, así como sus tasas de éxito en los casos de embarazo y nacimientos.
Sin embargo, aun con esta información debe tomarse en cuenta que la tasa de éxito de una clínica depende en buena medida de varios factores, como la edad de los pacientes al momento de someterse a la extracción de óvulos, o a la implantación de los mismos cuando han sido fecundados. En los casos donde el gasto de la congelación de óvulos sea un problema, puede solicitar información detallada sobre los costos asociados con cada etapa del procedimiento y por el precio de las cuotas anuales de almacenamiento.
Antes de comenzar el proceso de congelación de óvulos, es probable que deba someterse a ciertos exámenes que incluyen: Una prueba de reserva ovárica, que se usa para determinar la cantidad y la calidad de los ovarios. El médico puede realizarla midiendo la concentración de la hormona foliculoestimulante en la sangre, en el tercer día del ciclo menstrual. De esta forma será posible predecir cómo van a responder los ovarios a la medicación para la fertilidad. También serán necesarias las pruebas para detectar alguna enfermedad infecciosa, como el VIH.
Como última recomendación es importante preguntarse cuándo planea quedar embarazada, después de todo, la probabilidad de quedar embarazada estará directamente relacionada con el uso de los óvulos congelados y la edad que tenga al momento de utilizarlos. Otra pregunta importante sería considerar la cantidad de óvulos que le gustaría congelar. Los expertos en fertilidad recomiendan congelar un total de veinte a treinta óvulos, con la intención de descongelar de seis a ocho óvulos por cada intento de embarazo. Por último, vale la pena pensar qué haremos con los óvulos no utilizados; muchas personas deciden donar los óvulos a los centros de investigación o a las parejas que no son capaces de tener hijos, aunque también puede optar por descartar los óvulos que no hayan sido utilizados.
