Cuando una persona padece de anorexia, podría parecerle que no hay escape de este trastorno, sin embargo, la recuperación está a su alcance. Con el tratamiento, el apoyo de los demás, y el uso de estrategias inteligentes de autoayuda, es posible superar complicaciones como la bulimia y ganar nuevamente la confianza en uno mismo.
El primer paso para alcanzar la recuperación es admitir que se tiene un problema. Hacerlo implica reconocer que la incesante búsqueda por mantenerse esbelto se encuentra fuera de control, también reconociendo el daño físico y emocional que se ha sufrido a causa de ello.
El segundo paso es hablar con alguien, esto puede ser difícil, especialmente para las personas que han mantenido su anorexia en secreto durante mucho tiempo. No obstante, superar la vergüenza, la indecisión o el miedo comienzan por comprender que nadie está solo.
El tercer paso es hallar a las personas indicadas, que prestarán su ayuda en el intento de mejorar. Por esta razón, es imperativo mantenerse alejado de las personas, los lugares y las actividades que desencadenan la obsesión por estar delgado. Es posible que deban evitarse las revistas de moda, los amigos que hablan constantemente de las dietas o la pérdida de peso y mantenerse alejado de los sitios web que promueven la anorexia.
El último paso es buscar ayuda profesional, ya que el asesoramiento de un especialista en trastornos de la alimentación puede ayudar a recuperar la salud, enseñándole a los pacientes cómo comer con normalidad una vez más, y a desarrollar actitudes saludables sobre los alimentos y el cuerpo.
